El legado de Cortina d'Ampezzo como reina de los Dolomitas se fusiona con el espíritu artístico de Ortisei y la excelencia culinaria de Alta Badia. Cada subregión presume de acceso privilegiado a las pistas, rutas de senderismo serenas y hospitalidad reconocida. El diseño local se inspira en la tradición ladina, reflejada en chalets de piedra y retiros modernos. Esta zona atrae a familias e inversores globales gracias a sus políticas de protección y una sólida demanda de mercado. Vivir aquí es más que invertir; es acceder a un estilo de vida alpino codiciado durante todo el año.