Esta villa en Moraira logra un equilibrio entre la amplitud y la privacidad, ubicada a tan solo 400 metros de la playa. Con una superficie construida de 489 m² sobre una parcela de 1.867 m², la propiedad se enmarca entre céspedes maduros y pinos, invitando a un estilo de vida en sintonía con el clima mediterráneo.
En su interior, la villa alberga cinco dormitorios y tres baños. La planta baja ofrece tres habitaciones, incluida una suite con vestidor, un salón de doble altura, comedor, cocina, hall y un baño compartido. En la planta superior, el dormitorio de la buhardilla cuenta con baño con ducha, despacho y acceso a una terraza solárium. El sótano dispone de otro amplio dormitorio, bodega, gimnasio, lavandería, espacios técnicos y garaje para dos vehículos. Todas las estancias cuentan con aire acondicionado para un confort óptimo en cualquier estación.
En el exterior, la piscina privada dispone de canal de nado y sistema de contracorriente, con posibilidad de calefacción solar. Completan el conjunto dos porches cubiertos, una cocina exterior con barbacoa y horno de leña, y un pozo propio para riego que demuestra una infraestructura cuidadosamente pensada. Un sistema de ósmosis inversa garantiza agua potable purificada. Esta villa en Moraira ofrece un entorno creado tanto para el retiro como para la convivencia, donde el lujo sereno se encuentra a pocos pasos del mar.
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